PECULIARIDADES DEL COLOR NARANJA

 

El naranja es el color del budismo.

En occidente es un color asociado a la diversión, pero siempre subestimado. 

Si bien los fotógrafos lo usamos para dar sensación de calidez y, de alguna forma es un sinónimo de la alegría, no es de los colores más populares. Tiene un rol secundario en nuestros pensamientos y nuestra construcción de símbolos. Y tanto en inglés, orange, y en español son casi nulas las palabras que riman con ellas. 

Asimismo, es un color que no crea prestigio, pues son pocos o casi no existen objetos de diseño y caros que sean naranjas. Es rarísimo, aunque las reglas de seguridad lo aconsejarían, que los autos de las marcas más caras sean naranjas.

No existen gradaciones para el naranja, no existen casi en nuestro imaginario el naranja claro o el naranja oscuro. Si hablamos del atardecer nos referiremos a sus rojos o amarillos. Y si el pelo es naranja les diremos pelirrojos. Y el naranjísimo color de la zanahoria se convierte en zanahoria. Y cuando un hierro está anaranjado diremos que está al rojo “vivo”. 

Aunque no los nombremos, nuestro mundo visual está lleno de naranjas.

En occidente hay una excepción que revaloriza a este hermoso color. Es el color nacional de los holandeses y su Casa Real. Y al rojo de su bandera, contradiciendo las costumbres occidentales lo nombran como naranja. 

Y la bandera de Irlanda lo incluye entre sus 3 colores.

Autores: Espacio Fotográfico Marcelo Gurruchaga

Nota de dp: En el budismo, el naranja es el color sagrado y por eso la indumentaria de los monjes budistas es tradicionalmente de este color. Para el confucianismo, el naranja simboliza el color de la transformación.

Muchos medios de transporte o rescate que se usan en zonas de hielos eternos (Groenlandia, Antártida,etc. también lo usan como forma de visualización desde larga distancia). Similar uso se da a este color en los chalecos salvavidas.

dp