viernes, 26 de noviembre de 2021

PLANTAS QUE MATAN

 




Bienvenidos a Poison Garden, el jardín más venenoso del planeta: cualquier planta en él puede matarte




Por Albert Sanchis @asanchisull




Cuesta creer en cómo los primeros humanos se sacrificaron, sin saberlo, en la búsqueda prehistórica para saber qué plantas eran seguras para comer, cuáles eran adecuadas para curar y cuáles mutilarían o matarían a quien las tocara. Ahora, la gran mayoría confiamos en expertos para hacer estas distinciones por nosotros. A menos que estemos entrenados en este campo, es bastante seguro que ninguno de nosotros tendría la menor idea de evitar un envenenamiento de la naturaleza.

Sin embargo, esto no tiene por qué preocuparnos demasiado en una visita al jardín del que vamos a hablar a continuación. Ubicado en los terrenos del Castillo de Alnwick en Northumberland, Inglaterra, es una de las atracciones más bellas del norte del país, donde centenas de coloridas plantas invitan a los visitantes a pasear a través de hileras de rosas fragantes, topiarios cuidados y fuentes en cascada. Pero dentro de los límites de Alnwick, tras unas puertas de hierro negro, hay un lugar donde a los visitantes se les dice explícitamente que no se detengan a oler las flores.



Es Poison Garden, hogar de 100 asesinas despiadadas.

En este jardín, puedes admirar las plantas con los ojos, pero no puedes tocar ni oler nada, porque todas las plantas del jardín son venenosas y posiblemente podrían matarte.La historia y los orígenes de semejante atracción son igual de fascinantes que lo que en su interior se alberga.

En 1995, Jane Percy se convirtió en duquesa de Northumberland, este condado norteño que se extiende hasta la frontera con Escocia, después de que el hermano de su esposo muriera inesperadamente. Con el título llegó el Castillo de Alnwick, la sede tradicional del duque de Northumberland (y que también sirvió como escenario de Hogwarts en las dos primeras películas de Harry Potter). Después de que la familia se instalara en el castillo, el esposo de Percy le pidió que hiciera algo con los jardines, que en ese momento eran una silvicultura comercial en desuso que no contaba más que con hileras de árboles de Navidad.





"Debió pensar: 'Eso la mantendrá callada, plantará algunas rosas y eso será todo'", contaba la duquesa. Pero Percy hizo más que plantar algunas rosas. En 1996 contrató a Jacques Wirtz, un arquitecto paisajista que ha trabajado con las Tullerías en París y los jardines de la residencia del presidente francés, para ayudar a reimaginar el jardín de Alnwick. En realidad, quería algo que diferenciara su proyecto de los otros jardines que salpican la campiña inglesa. "Si está construyendo algo, especialmente una atracción para visitantes, debe ser algo realmente único", decía.

La duquesa pensó que podría querer incluir un jardín boticario, pero un viaje a Italia la puso en un rumbo ligeramente diferente. Después de visitar el Infame Jardín de Veneno de los Médici, la duquesa quedó cautivada con la idea de crear un jardín de plantas que pudieran matar en lugar de curar. Otro viaje, este al sitio arqueológico del hospital más grande de la Escocia medieval, donde la duquesa se enteró de las esponjas soporíferas empapadas en beleño, opio y cicuta que se usaban para anestesiar a los amputados durante las cirugías del siglo XV, reforzó su interés en crear un jardín de letales plantas.


“Esta es una forma de interesar a los niños. A ellos no les importa que la aspirina provenga de la corteza de un árbol. Lo realmente interesante es saber cómo te mata una planta, cómo muere el paciente y cómo te sientes antes de morir", contaba. Así que la duquesa se dedicó a recolectar plantas venenosas para su imaginado Poison Garden. Mientras seleccionaba las 100 variedades que terminarían echando raíces allí, solo pedía un requisito para cada nueva adquisición: las plantas tenían que contar una buena historia. Esto significaba que asesinos exóticos como Brugmansia de América del Sur se mezclarían con venenos más comunes, como los setos de laurel.

Lo extraordinario de las plantas es que son las más comunes que la gente no sabe que son asesinas. Los visitantes a menudo se sorprenden al saber que el seto de laurel, casi omnipresente en los jardines ingleses, puede ser altamente tóxico. Pero algunos visitantes han tenido experiencias con el lado siniestro del laurel. Después de cargar sus autos con hojas de laurel podadas para llevarlas al basurero, algunos conductores se han quedado dormidos al volante debido a los gases tóxicos que las ramas emiten. También hace unos años, siete personas se desmayaron por inhalar estos gases mientras caminaban por el jardín.





Hay más de 100 plantas en Poison Garden, y todas son venenosas. El jardín contiene plantas muy peligrosas como la cicuta; dedalera; Atropa belladonna; y strychnos nux-vomica, que es de donde proviene la estricnina. También está la planta Rincinus communis, que nos da aceite de ricino, pero también nos da ricina, que es un veneno. El laurel, que también vive en el jardín, es una bonita planta que produce cianuro. Aunque, hogweed puede parecer la planta más desagradable del conjunto. Tocarla desencadena una reacción fototóxica y quema la piel. Las ampollas causadas por la reacción pueden durar hasta siete años. El jardinero jefe, Trever Jones, incluso tiene que moverse por el jardín con un protector facial, guantes y un traje hermético.

El jardín, además, tiene trampa. Contiene muchas asesinas que en realidad parecen flores hermosas, como los árboles de Laburnum, que tienen impresionantes flores amarillas, así como semillas mortalesAconitum es otra planta engañosamente mortal. Tiene bonitas flores azules y bayas venenosas. Las hojas, raíces y tallos también pueden matarte.

El hecho de que el Poison Garden esté lleno de veneno, literalmente, no impide que la gente haga cola para visitarlo. Alrededor de 800.000 personas visitan el jardín cada año. Como parte de la misión educativa, la duquesa cultiva una variedad de drogas, desde cannabis hasta cocaína, que ella y los guías del jardín utilizan como punto de partida para la educación sobre las drogas. "Es una forma de educar a los niños sin que se den cuenta de que están siendo educados", dice.


Fuente: https://magnet.xataka.com/un-mundo-fascinante/bienvenidos-a-poison-garden-jardin-venenoso-planeta-cualquier-planta-puede-matarte



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jueves, 25 de noviembre de 2021

EL MITO MAPUCHE Y LA HISTORIA






“El lenguaje no solo describe la realidad, sino que además es capaz de crearla”, con esta frase inicié un artículo anterior hablando de falsos mitos en la historia de nuestros pueblos originarios esta frase del Dr. Mario Alonso Puig vuelve a servir para introducir el tema no solo del mito sino también del reclamo y la reivindicación.

La actriz y cantante alemana – estadounidense describió de manera perfecta el fenómeno actual sobre los reclamos mapuches “La repetición es la más vigorosa de todas las figuras retóricas”. 

Hace varios años que existen en América y en nuestro territorio una política de reivindicación con el título de pueblos originarios es en este sentido en la región de la Patagonia se escucha con mayor frecuencia noticias sobre grupos de Mapuches que buscan tomar tierras y las ocupan tan solo con el argumento de que las mismas pertenecían a sus ancestros.

La historia de los autodenominados Mapuches se ha prestado a diferentes interpretaciones porque se ocultaron fuentes o porque se confundieron las fuentes y en algunos casos se ha mentido descaradamente.

Los pueblos originarios son considerados de esta manera por que ya existían dentro del territorio al momento de la conquista y la colonización por parte de los españoles.

En este contexto España ya había fundado ciudades en varios puntos del territorio argentino Buenos Ayres (1536), Mendoza (1561), San Luis (1594), en la capitanía de Chile, Santiago (1541), La Serena (1544), Concepción (1550), La Imperial (1551), Valdivia (1552), Villarrica (1552) y Los Confines (1553)

Es importante comprender el contexto que se vivía en el continente antes de la llegada de los españoles.

  • En la región que abarca Chile y Argentina no existía una unidad entre las muchas tribus de aborígenes que vivían.
  • Eran diferentes sus idiomas, costumbres, religión.
  • La ubicación geográfica de cada grupo era bastante imprecisa ya que muchos eran nómades y otros modificaban permanentemente su zona de influencia en busca de comida atacando y conquistando a las tribus más débiles.
  • Los conflictos eran moneda corriente y algunos llegaron hasta la desaparición total como grupo étnico.
  • Los Araucanos no se llaman Mapuches, tradicionalmente se llamaban Reches, nunca se llamaron Mapuches.
  • Los Araucanos no usaban la tierra que poseían, sino que solamente usaban pequeños espacios de tierra al lado de la ruta, por lo tanto, las tierras no eran productivas y era un desperdicio (tal como lo declaró en historiador chileno Sergio Villalobos).
  • El pueblo Araucano en la época de la conquista y el virreinato eran cazadores y recolectores y recién descubrían el cultivo de la tierra.
  • La cultura de la que luego se denominaría Mapuche, era sencilla, fragmentada, tribal, separada por caciques cada uno según línea familiar, y solo con la guerra eran parcialmente unida.
  • La cultura no era tan valiosa como la romana y la siria, la cultura mapuche tuvo un aporte muy pobre, no hubo una dinámica creadora.
  • No tuvieron influencia cultural como la Maya, Azteca, los Chibchas, la Inca y aun la Aymara.





Hagamos un poco de historia


El historiador chileno Sergio Villalobos nos ilustra lo siguiente, “Los Araucanos no se llaman Mapuches, tradicionalmente se llamaban Reches nunca se llamaron Mapuches”.

En Chile con respecto a las tierras del sur y las comunidades de los pueblos originarios, no tiene ningún tratado ni parlamentos ni concesiones si acuerdos, es cierto que en algunos casos fueron despojados de sus tierras, en otros casos los caciques vendían sus propias tierras, pero también debemos dejar claro que el estado chileno reservó grandes extensiones de tierra para los Araucanos.  Nuevamente el historiador Sergio Villalobos nos dice “La cultura dominante chilena benefició en mucho, les dio caminos, ferrocarril, ciudad, establecimientos de salud, educación”.

El pueblo originario antes de ser conocidos como Mapuches fueron llamados Araucanos por los Incas, pertenecían a la región del sur de chile con límites en el río Bío Bío al norte, el Toltén al sur, el Océano Pacífico al oeste y la Cordillera de los Andes al este, los Araucanos comenzaron a cruzar Los Andes hacia el este de manera sistemática a partir del año 1650 con la finalidad de capturar el ganado y los caballos que habían traído los españoles o sea que más de 100 años después de que se funda la primera ciudad del territorio argentino, de forma violenta los denominados Mapuches trataron de dominar la región.

Un dato importante, ni Juan Manuel de Rosas o Julio Roca en la campaña del desierto mencionaran a los Mapuches como pueblo, tampoco historiadores de la época ni Lucio Mansilla en su famosa expedición a los indios Ranqueles, ningún jefe indígena figuró que combatió como Mapuche este término fue completamente desconocido hasta principios del siglo 20.

Cerca de 1903 se creó el nombre para aplicarlo a los indígenas tanto de Chile como de Argentina en un contexto de conflictividad en aumento entre los dos países de esta manera se hacía desaparecer virtualmente viejas etnias como los Araucanos, Borogas, Pampas, Huiliches o Tehuelches aglutinándolos a todos bajo el nombre de Mapuches, si bien es cierto que la palabra existió desde tiempos inmemoriales, esta no daba entidad a una comunidad o pueblo, la palabra Mapuche como pueblo originario es un invento moderno del siglo 20.

La historia también ha olvidado como actuaban estos Mapuches, el uso de la fuerza como medio de imposición invasión y destrucción a los tranquilos pobladores de la zona, como los  Tehuelches meridionales  que solo tenían armas primitivas como boleadoras y cuchillos, fueron atacados y vencidos por los Araucanos con la ventaja de saber luchar a caballo con sus largas lanzas y sus corazas de cuero eso ocurrió en las batallas de la Languiñeo que quiere decir “lugar de muchos muertos” y la masacre de Masallé.

Otro sangriento ejemplo fue el combate de Choele Choel en el año 1821 un gran malón de Araucanos había ingresado a  territorio argentino siendo este ya una nación independiente, los Tehuelches septentrionales presentaron unos 1800 guerreros con la intención de cortarles la entrada, eligieron para esta acción el lugar denominado Choele Choel, fundamental en el camino hacia Chile dado que era el mejor paso para el ganado que se robaban de las Pampas con destino a Chile, los Araucanos hicieron una de las más feroces matanzas y lograron apoderarse del paso de Choele Choel quedando en manos de aborígenes chilenos que por cierto también era país independiente.

Casi en forma simultánea los Borogas que poblaban la región a la altura del río Imperial fueron asimilados en un proceso de aculturación, se vieron forzados a abandonar la Araucanía su tierra natal, se produjo entonces su migración viéndose obligados a cruzar la cordillera acompañados por los bandoleros españoles llamados los Pincheira una vez en tierra argentina lo primero que hicieron fue robar y saquear el sur de Mendoza, San Luis, Córdoba, Santa Fe y el noroeste de Buenos Aires.

Finalmente desalojaron a los pobladores ancestrales de esas pampas serranas de la zona de laguna de Monte Carhué y Epecuén de la provincia de Buenos Aires. Haciendo de estos lugares su asiento, debemos tener en cuenta la importancia de estos puntos geográficos para los arroyos de ganado robado por sus buenos pastos y abundante agua a tal punto que 40 años más tarde el famoso cacique Calfucurá antes de morir instruyó a sus hijos para que jamás dejen al blanco ocupar a estas tierras.

Un personaje importante en la historia Mapuche es el cacique Calfucurá, nombre de los más importantes de la historia de la zona pampeana, hombre aguerrido, pero también asesino y tirano,

Calfucurá no nació en la Argentina, nació alrededor de 1780 a 1790, en lago Cólico-Mapu cercano a Pitrufquén en la región del alma en Chile, su padre se llamaba Huentecurá era un ex capitanejo o ex cacique Huilliche de la etnia Pehuenche integrante de la familia de las piedras era de la etnia Pehuenche.

Huentecura el padre de Calfucurá se había asentado en esa zona solo con su familia al sur de donde vivían los Araucanos tras abandonar a su gente por razones que no se conocen, Calfucurá no era Araucano ni Mapuche sobre todo Mapuche porque este nombre es de tardía aparición.

El ingreso a la argentina fue en 1834 gracias a un acuerdo que había hecho con Juan Manuel de Rosas que necesitaba ayuda para combatir a los aborígenes ya que en ese momento habitaban las zonas que justamente eran ambicionadas por los ganaderos. Cumpliendo los acuerdos preexistentes con el Gobernador de la Provincia de Buenos Aires atacó y masacró directamente a los indígenas que habitaban o a los pueblos originarios que habitaban en nuestro territorio.

Por ejemplo, atacó a los Borogas en Masallé en 1834 actual zona de Guaminí y a los Moluches en 1837 cerca del río Agrio en Neuquén, estos Borogas y Moluches tampoco eran de origen argentino, habían cruzado la cordillera y aunque procedían de la misma región chilena, no pertenecían a su etnia, eran Araucanos, por otro lado los Moluches habían cruzado desde Chile en 1837 y se dedicaron a maloquear por los alrededores de la fortaleza que protegía al poblado de Bahía Blanca, la atacaron y como no pudieron vencerla se propusieron a maloquear por esos campos llegando a arrear a Chile cerca de 200.000 cabezas de ganado robadas.




Los Borogas también fueron masacrados por Calfucurá, habían llegado 10 años antes, estos aborígenes originarios habían sido derrotados en Chile por los patriotas chilenos porque ellos combatieron a favor de Fernando 7°, al ser derrotados huyeron del país, acompañados por unos guerrilleros españoles denominados Pincheira, ellos buscaron un refugio en las pampas argentinas, se dedicaron a maloquear en una franja desde el sur de Mendoza hasta Buenos Aires, especializándose en tomar miles de cautivos, mujeres jóvenes y niños porque a los hombres los eliminaban directamente, robando millares de cabezas de ganado llevándolas para vender en Chile, (uno de los compradores, tanto de los cautivos como del ganado era Calfucurá), estos indígenas atacaron a los Tehuelches que eran sí originarios de esta tierra estos eran un grupo originario que han sido descriptos como un pueblo tranquilo, no eran guerreros ellos inclusive ayudaron en algún momento al asentamiento de los primitivos inmigrantes galeses en el sur y no tenían armas de fuego, por supuesto no estaban armados para combatir, eran amigables, mientras los Borogas contaban con armas de fuego, cosa que los Tehuelches no tenían.

Calfucurá decidió radicarse en nuestro territorio en 1834, con el acuerdo que había hecho con Juan Manuel de Rosas donde incluía masacrar las tribus que residían en suelo argentino, la realidad es que él mató más indios de los que mataría Julio Argentino Roca en la famosa campaña al desierto las muertes a manos de Calfucurá fueron no menos de dos mil personas, a Roca se le atribuye oficialmente la muerte de 1.270 indígenas durante esa campaña el desierto (en realidad la acción militar del General Roca evitó una guerra con Chile y permitió avanzar sobre la consolidación del estado-nación).

La primera acción conocida de Calfucurá, fue atacar a los Borogas en Másaye donde estos los esperaban pacíficamente, el aviso de Calfucurá era que venían desde Chile a comercializar estaban tan acostumbrados a comercializar con Chile, de lo que robaban en las tierras Patagónicas, que los esperaron pacíficamente, esta reunión tranquila y pacífica terminó en una masacre, a los Moluches los sorprendió también de la misma manera,  con la idea de reunirse para hablar cerca del río Agrio en 1837 al vencer a estos dos grupos murieron caciques muy importante en esa época como el Cacique Rondeau, Melin y Raíles y muchos otros caciques menores y capitánajos y como ya dijimos más de 2000 indígenas y originarios murieron y por supuesto al vencer arrasaron con todo, convirtieron a todos los miembros de las familias de estos caciques en sirvientes, esclavos o cautivos para venderlos y por supuesto les robaron todas sus posesiones y cabezas de ganado.

Una historia que describe lo que era Calfucurá, con la finalidad de humillar aún más a sus enemigos es la siguiente, tomó obligadamente o mejor dicho hace su mujer a la esposa preferida del Cacique Rondeau al que recién había masacrado, la obliga a ser su mujer y esta mujer olvidada por la historia llamada Suvillan, intentó negarse a ser sometida y siempre intentó mantener la memoria de su marido al que ella consideraba que había sido asesinado alevosamente y a traición.

La llegada de Cafulcurá a la argentina, también de los Borogas como los Moluches todos etnia Williche es decir que no son originarios de la Argentina donde se asentaron recién en 1822 como eran conocidos.

Hay un gran debate sobre cómo se llamaban, cuáles eran sus nombres, se llamaban a sí mismos reyes, en 1471 los Incas habían invadido Chile a las órdenes de Túpac Inca Yupanqui, pero llegaron solo hasta el río Bío Bío. Los Incas los llamaron Aucas que en su idioma significa alzados o rebeldes y ese fue el hombre que les quedó, posteriormente los españoles influenciados por el poema de Alonso de Ercilla y Zúñiga “La Araucana” empezaron a llamarlos Araucanos, ese fue el origen del nombre de estas tribus que después asolarían el territorio argentino y chileno.

Hoy se autodenominan Mapuche así sin singular ni plural Mapuche que significa “gente de la tierra” es un nombre que surgió más de la antropología que de la realidad social, este nombre Mapuche viene del idioma Mapudungún, intentan abarcar a varias etnias que en realidad no tienen nada en común, etnias de un lado y del otro de la cordillera.

Llega a nuestra época la palabra Mapuche pero esta palabra no existía en la época de Cafulcurá como descripción de un pueblo o etnia, esta fue acuñada después.

Cuando hablamos de los pueblos originarios de la Patagonia y la Pampa Argentina nos olvidamos de los Tehuelches, de los Selk’nam, Yaghan y Kaweskar, asi también los Wichi, Chotore, Pilagá, tobas entre otros.  Inclusive hay daguerrotipos y dibujos de estos grupos realmente originales de suelo argentino que cumpliendo un terrible destino de la historia fueron masacrados y prácticamente exterminados obviamente también lo que quedó fueron asimilados por los invasores como siempre ocurría.


Terrorismo Mapuche en la actualidad

El origen de Calfucurá es clarísimo a qué etnia pertenecía, también el de los otros personajes y tribus que hemos nombrado y pareciese que hoy se afirma como si hubieran sido los primeros en vivir en la Patagonia argentina y no es así, llegaron recién después de 1800 antes de ellos existían otras etnias que están pasando al olvido.

Se debe terminar con la mentira del hogar ancestral de los nobles Mapuches o los supuestos derechos de los pueblos originarios, tales interpretaciones violan la soberanía nacional.

Los pueblos originarios tienen derecho a que se respete su cultura y su idiosincrasia en la medida que ésta no afecte los derechos la cultura e idiosincrasia de los pueblos chilenos y argentinos en su conjunto, en la actualidad estas comunidades organizadas mediante el uso de la fuerza usurpan y ocupan campos y terrenos que no les pertenecen, han realizado más de 400 usurpaciones que representan varios millones de hectáreas, en Chile los Mapuches tienen un largo historial terrorismo contra personas y violaciones contra la propiedad pero desde hace casi una década, los activistas Mapuches han comenzado a realizar atentados también en suelo argentino, desgraciadamente cuentan en su accionar con el apoyo de organismos de derechos humanos que desconocen el pasado histórico y defienden ideológicamente intereses en contra de la unidad nacional apoyando los intereses ajenos, buscando crear un estado independiente dentro de dos países.

En los años 90 con la llegada de la democracia también aparecen organizaciones de izquierda, marxistas, en Chile por ejemplo aparece el concejo de todas las tierras, luego surgirá el concejo político Mapuche exacerbando una supuesta rica cultura ancestral y reclamando el derecho de la autodeterminación, eso para un país federal o unitario sería un error gravísimo permitir la autodeterminación en este caso del supuesto pueblo Mapuche, porque permitiría situaciones de privilegio con respecto a otras comunidades originarias.

Hablando siempre de los Mapuches, hay en ellos mucho de occidentalismo que han ido incorporando como la cultura, tecnología, vestido, alimentación, seguridad, etc, y también beneficios como exención de impuestos territoriales y muy pocos de ellos hablan el idioma materno el Mapudungun..

Los Mapuches como cualquier otra cultura son chilenos o argentinos la visión de los Mapuches es retrograda, va a hacia atrás y está envuelto con otros intereses, como el terrorismo, (denuncia hecha por el ex senador argentino Picheto), recibiendo apoyo internacional de facciones de la FARC Colombia, de Cuba y del Sendero Luminoso Perú.

Lo cierto es que debemos integrarnos como nación, abandonemos las diferencias que nos han atado y comencemos ahora, de una vez por todas a integrarnos, respetando nuestra individualidad, enriqueciendo la cultura para así poder construir un futuro mejor.


Autor: Juca Fevel


Bibliografía

Conoce al verdadero pueblo originario, los Tehuelches, y su historia de invasión y muerte.

Rodolfo Casamiquela, La verdadera antigüedad de los Mapuches en Argentina»

Roberto Porcel, «Calfucurá, los Mapuches y los pueblos originarios de Argentina»

Ley Nacional 23302, art. 2, sobre comunidades indígenas originarias. – Convenio 107 de la OIT sobre poblaciones indígenas y tribales, año 1957, ratificado por Ley Nacional 14392.

Sergio Villalobos “Sobre los Mapuches”.

Silvia Ratto, “La lucha por el poder en una agrupación indígena, el efímero apogeo de los Boroganos en las Pampas.

Dionisio Schoo Lastra,” El indio del desierto”

Yunque Álvaro; en «Historia de los argentinos. Calfucurá, la conquista de las Pampas»

Ricardo Noceti, “La Sangre de la Tierra”.

Jorge Iván Vergara, Rolf Foerster “Permanencia y Transformación del Conflicto Estado-Mapuches en Chile”.


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Jones Huala, otra mentira Mapuche. Autoproclamado líder. Hoy en prisión en Chile, acusado de terrorismo



miércoles, 10 de noviembre de 2021

LA PLATA, LA CIUDAD DE LOS GEOMETRAS

 

LIBRO RECOMENDADO

 Gabriel Darrigan



Mucho se ha escrito sobre la historia de La Plata, pero, en el bicentenario de la provincia de Buenos Aires, esta obra realiza un aporte historiográfico inédito a través de los documentos privados de los ciudadanos que ingresaban a los grupos más misteriosos y desconocidos que han estado presentes desde los albores de la República.

La organización de los primeros centros masónicos platenses coincide con hechos políticos relevantes: la candidatura de Dardo Rocha a la presidencia, la Revolución del Parque o las tensiones entre roquistas y rochistas, son solo algunos de los ejemplos. La presencia en la ciudad de una logia con estrechos vínculos con el Poder Judicial, con el objeto de agrupar a abogados y jueces en un mismo espacio de socialización, está directamente relacionada al proyecto de ley para fundar una universidad y, posteriormente, salvaguardar el único establecimiento universitario provincial.

Y en medio de todo ello, una constante: se puede evidenciar que, tanto sea como símbolo de orden moral, como ciencia útil para los obreros de la construcción, o como instrumento pedagógico para enaltecer la razón humana, la masonería utilizó a la Geometría en beneficio de la población de La Plata desde el principio.



Conseguirlo vía:

En Mercado Libre: https://articulo.mercadolibre.com.ar/MLA-882167702-masoneria-la-ciudad-de-los-geometras-vol-1-_JM

o contacto en: historiadelaplata@gmail.com



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martes, 9 de noviembre de 2021

VISITA GUIADA: SIMBOLOGIA Y MASONERIA EN MICROCENTRO PORTEÑO. 11/2021

 

 SABADO 4 DE DICIEMBRE DE 2021. 16:30 hs






LOS INVITO A DESCUBRIR LA HUELLA DEJADA POR LA MASONERÍA EN EL MICROCENTRO PORTEÑO.
DESCUBRAMOS JUNTOS EL TRIANGULO MASÓNICO Y EL JUEGO NUMEROLOGICO QUE OCULTA BUENOS AIRES.
UN RECORRIDO DISTINTO, BASADO EN LA INTERPRETACIÓN DE LA SIMBOLOGÍA, QUE TODOS VEN, PERO QUE POCOS LOGRAR DESCIFRAR.
VISITEMOS JUNTOS LA PLAZA DE MAYO, LA CATEDRAL Y EL MAUSOLEO DEL GRAL. SAN MARTIN, LA IGLESIA DE SAN IGNACIO Y LA MANZANA DE LAS LUCES, PARA TERMINAR EN LA IGLESIA DE SANTO DOMINGO, DONDE DESCANSA MANUEL BELGRANO.

SE SUSPENDE POR LLUVIA. 
PUNTO DE ENCUENTRO: CATEDRAL METROPOLITANA, PUERTA PRINCIPAL SOBRE SU COSTADO DERECHO. 16:30  hs.
COSTO: 1000 $ POR PERSONA. MENORES DE 16 AÑOS NO PAGAN.
LLEVAR CALZADO COMODO Y AGUA.
DURACIÓN: ALREDEDOR DE 2 HORAS. 


Unicamente previa inscripción vía Twitter, Facebook, Instagram o correo electrónico
Escriba a los e-mails: daniel_pena1872@yahoo.com.ar
o danielpena1872@gmail.com 
o Twitter: @2011dp  
o Facebook: Daniel Pena dp 
Instagram: danielpena1872




Con numeroso contingente en Plaza de Mayo


Se pueden hacer pedidos especiales en días diferentes al ofrecido, previa coordinación de agenda. 
Por grupos numerosos, consultar tarifa promocional.
Les agradecería difundir esta información entre sus contactos.




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lunes, 8 de noviembre de 2021

SIMBOLOGIA DE LA PELICULA MATRIX

 

Podcats de mi amigo Eduardo Seleson sobre la Simbología de Matrix. Imperdible


(copia y pegar en nueva página)



https://open.spotify.com/show/4h35ffIsM3irUePn8pxipo



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lunes, 1 de noviembre de 2021

OTRA FORMA DE CONSTRUCCION DE MITOS

 



El falso mito de las banderas de los pueblos originarios



 “El lenguaje no solo describe la realidad, sino que además es capaz de crearla”, esta descripción del Dr. Mario Alonso Puig, sirve para introducir el tema del mito.  El mito es un relato, una historia que ha sido contada muchas veces y que su objetivo es expresar una forma de ver el mundo.

¿Por qué es importante entender la importancia del mito? Como dice el profesor y escritor estadounidense Joseph John Campbell “El mito dice responder a ciertas crisis de desilusión o placer o fracaso o éxito, el mito me dice dónde estoy”, El austro húngaro Bronislaw Malinowsky afirma que “el mito resucita una realidad primordial con el fin de satisfacer necesidades religiosas, morales, etc”.

El mito delimita cuatro funciones importantes:

  • La función mística, por la que abre al mundo a la dimensión del misterio y lo torna imagen sagrada
  • La función cosmológica, al mostrar la forma del universo patentizando su misterio, no como la ciencia.
  • La función sociológica, en virtud de la cual valida y fundamenta un orden social.
  • Función pedagógica, la enseñanza de cómo vivir una vida humana bajo cualquier circunstancia.

Podemos decir que el mito no se limita a expresar el sentido de la vida, es también la resonancia interna de la experiencia de la vida. He allí la importancia de no menospreciar los mitos que se forman en nuestras realidades.

Claude Lévi-Strauss sostiene que “nada se parece más al pensamiento mítico que la ideología política”.

Los mitos buscan navegar por los cauces de la memoria, y en ese aspecto, como diría Todorov “todo depende del propósito que perseguimos con su evocación”. Y es que en este tiempo donde hay nuevos mitos y la mayoría de ellos de carácter progresista históricos, sufrimos una manipulación de la historia.

Parafraseando a Enrique Krauze diremos “El populismo fue y es un mal endémico de América Latina…anuncia el amanecer de la historia, promete el cielo en la tierra. Cuando llega al poder, micrófono en mano, decreta la verdad oficial, desquicia la economía, azuza el odio de clases, mantiene a las masas en continua movilización, desdeña los Parlamentos, manipula la historia, genera nuevos mitos, acota las libertades.


Siguiendo la línea de pensamiento de Axel káiser en su libro junto a Gloria Álvarez diremos que el mito populista se ajusta a esta descripción, “para entender el engaño que debemos enfrentar y superar. La primera es un desprecio por la libertad individual y una correspondiente idolatría por el Estado…La segunda es el complejo de víctima, según el cual todos nuestros males han sido siempre culpa de otros, y nunca de nuestra propia incapacidad para desarrollar instituciones que nos permitan salir adelante. La tercera, relacionada con la anterior, es la paranoia «antineoliberal», según la cual, el neoliberalismo —o cualquier cosa relacionada con el libre mercado— es el origen último de nuestra miseria. La cuarta es la pretensión democrática con la que el populismo se viste para intentar darle legitimidad a su proyecto de concentración del poder. La quinta es la obsesión igualitarista, que se utiliza como pretexto para incrementar el poder del Estado…”

Veremos el mito de la bandera de los pueblos originarios que hoy se asocia de manera natural a la bandera del colectivo LGBTQ+ ¿Por qué consideramos importante hablar de ello? El novelista Albert Camus dijo “los mitos tienen más poder que la realidad”.

 En 1994, la Asamblea General de las Naciones Unidas decidió mediante la resolución 49/214 instaurar el 9 de agosto como el Día Internacional de los Pueblos Indígenas, en conmemoración a la primera reunión del Grupo de Trabajo de la ONU sobre Poblaciones Indígenas. En esa y otras fechas en diversos países de Hispanoamérica se cuelga una “bandera indígena”, la gobernación de la Ciudad de Buenos Aires izó la supuesta bandera de los pueblos originarios, también presentó un pequeño video clip basado en la Wiphala de origen moderno y del altiplano andino. 

¿Cuál es el fin con estas presentaciones? Entre otras cosas buscar eliminar o menospreciar la herencia cultural española, repotenciar de manera engañosa el supuesto ideal de los pueblos originarios y desde la perspectiva política alinearse con la ideología socialista. Siendo que, en algunos ámbitos de la investigación social y la academia buscan reinterpretar el día de la hispanidad como el día de la resistencia indígena, idea propuesta y promovida por Hugo Chávez y luego difundida por Evo Morales, los Kirchner, entre otros ex mandatarios populistas. Pero ¿por qué sucede el hecho de seguir los mitos? George Steiner comentaba al respecto “En este momento del siglo XX tenemos hambre de mitos, de explicaciones totales, y anhelamos profundamente una profecía con garantías”.

Usaremos las palabras de Mario Bunge hablando de la ciencia y el mito, y como la ciencia se basa en datos es pertinente su comentario: “El mundo del hombre contemporáneo se funda sobre los resultados de la ciencia: el dato reemplaza al mito, la teoría a la fantasía, la predicción a la profecía”.

Hagamos un poco de historia, existen dos datos a tener en cuenta: La bandera incaica con sus 7 colores nunca existió como tal y la wiphala que se compone de 49 cuadros con los colores del arcoíris, agrupados en diagonal, la exhiben como un símbolo étnico ancestral de los indígenas andinos y, por ello, como emblema de la lucha contra los españoles en el siglo XVI. Sin embargo, tales emblemas no son más que un fraude bastante reciente.

Bandera Incaica del Cuzco

Su diseño consta de siete bandas horizontales de siete colores a imitación del arcoíris. Fue adoptada oficialmente en 1978. En el año 2021 la modificaron con el fin de incluir el escudo del Cuzco en la parte central.

La génesis de la historia de dicha bandera es la siguiente. La radio Tawantinsuyo del Cuzco, fundada por el locutor Raúl Montesinos Espejo inicialmente con el nombre de Radio Rural se dedicaba a la transmisión de música folklórica donde alcanzó gran difusión y audiencia. En 1973, hacia el vigésimo quinto aniversario de la emisora, Montesinos propuso la bandera arcoíris presentándola como propia de los incas.

La gerencia de la cervecera Cervesur auspició con S/.500 la confección de una bandera que fue trasladada en procesión desde el local de la radio en la Av. El Sol hasta la Plaza de Armas donde fue izada. Cinco años después, el 9 de junio de 1978, Elberto Muñoz Carpio alcalde de la Municipalidad Provincial del Cusco adoptó la bandera como oficial, a propuesta del profesor Mario Cutimbo Hinojosa, a la sazón regidor e Inspector de Cultura del municipio, mediante Resolución Municipal N° 17 de esa misma fecha.

Fruto de la confusión creada por la forma en que Raúl Montesinos Espejo presentó a esta bandera multicolor, la gente empezó a asociarla con el Tahuantinsuyo (o imperio inca). Sin embargo, la historiografía peruana ha sido enfática en precisar que para la cultura inca no existió el concepto de bandera, y que por tanto ésta nunca tuvo una. Así lo ha afirmado la historiadora e investigadora María Rostworowski (1915-2016), quien al ser consultada sobre esta insignia multicolor señaló: “Le doy mi vida, los incas no tuvieron esa bandera. Esa bandera no existió, ningún cronista hace referencia a ella. […] Separemos las cosas verídicas de las tonterías. Es momento de hacer un deslinde y rectificar, porque está tomando cuerpo una cosa que no es histórica. Y la Historia hay que defenderla”.

En el año 2011, el Congreso de la República del Perú, citando a la Academia Peruana de la historia se pronunció contra esta supuesta bandera del Tahuantinsuyo: El uso oficial de la mal llamada “bandera del Tahuantinsuyo» es equívoco e indebido”. En el mundo prehispánico andino no se vivió el concepto de bandera, no corresponde a su contexto histórico.

Paralelamente a la creación de la bandera del Cuzco, a finales de los años setenta, se gestaba en California la similar Bandera LGBT, la cual adoptaría su actual forma en 1979, y posteriormente se haría conocida internacionalmente, mientras que la bandera cusqueña comenzaba a ser usada por varias comunidades andinas indígenas, especialmente desde Ecuador hasta Bolivia. Esa situación produjo la expresa disconformidad de varios cusqueños, lo que devino a un fuerte debate acerca de si cambiar la bandera de la ciudad.

Bandera LGBT

Por otro lado, El primer uso registrado en el Perú de una bandera arcoíris estaría vinculada al movimiento cooperativista que aparece en escena a principios del siglo XX.

El francés Charles Fourier, uno de los precursores ideológicos del cooperativismo, habría adoptado el emblema de la bandera del arcoíris como símbolo propuesto para sus utópicos falansterios, que nunca vieron la luz. Los seguidores de Fourier mantuvieron el recuerdo de la bandera tras su muerte, acontecida en 1837. En 1896, durante el Segundo Congreso de la Alianza en París, el representante del Familisterio de Guisa, F. Bernardot, propuso a la organización la adopción del símbolo de los familisteristas: una bandera con los siete colores el arcoíris representando “la unidad en la diversidad”. En 1923 en Gante (Bélgica), en el Comité Ejecutivo de la Alianza Cooperativa Internacional (ACI), por iniciativa del economista cooperativista francés Charles Gide, se tomó la decisión de institucionalizar la propuesta de Bernardot. Según el ex alcalde cusqueño Julio Gilberto Muñiz Caparó, en cuya gestión municipal fue adoptada oficialmente la bandera cusqueña, la idea de una bandera arcoíris le habría sido propuesta a Fourier por la feminista franco-peruana Flora Tristán, según la inspiración que tuvo ella al visitar un supuesto templo en Cumana dedicado al arcoíris.

¿Qué dice la historia con datos reales?

Entre las crónicas más tempranas del Virreinato, Jerez y Sancho, 1534; Betanzos, 1551; Santo Tomás, 1560 son ausentes o vagas las referencias a símbolos tipo bandera dentro del ejército de los incas.

Para cronistas más antiguos, posteriores a las reformas del virrey Francisco de Toledo y al Tercer Concilio de Lima, hubo algún estandarte (unancha) imperial, “la cual era utilizada por las huestes incaicas al momento de su arribo al territorio que actualmente pertenece al Perú en 1533. el guion o estandarte real era una banderilla cuadrada y pequeña, de diez o doce palmos de ruedo, hecha de lienzo de algodón o de lana, iba puesta en el remate de una hasta larga, tendida y tiesa, sin que ondease al aire, y en ella pintaba cada rey sus armas y divisas, porque cada uno las escogía diferentes, aunque las generales de los Incas eran el arco celeste y dos culebras tendidas a lo largo paralelas con la borda que le servía de corona, a las cuales solía añadir por divisa y blasón, cada rey las que le parecía, como un león, un águila y otras figuras. Tenía por borla el dicho estandarte ciertas plumas coloradas y largas puestas a trechos”.

La Wiphala




Se compone de 49 cuadros con los colores del arcoíris agrupado en diagonal, la exhiben como un símbolo étnico ancestral de los indígenas andinos y, por ello, como emblema de la lucha contra los españoles en el siglo XVI.

El indigenista boliviano Franco Limber en su obra “Breve historia real de la Wiphala” argumenta que las referencias históricas de la Wiphala “son contadas, incluso muchas de ellas son de imposible comprobación” y que, por ello, “los intelectuales indios recurrieron a la imaginación para llenar un vacío”. De hecho, el primer vacío que se vieron obligados a rellenar fue la misma inexistencia del concepto de “bandera” en la América precolombina.

En 1945 un historiador llamado Hugo Lanza presentó en el Congreso Indigenista Boliviano el término “wiphala” basado en un par de conjeturas lingüísticas, el termino derivaba según él, de la palabra “wiphai” (triunfo) y de “lapks-lapks” (onomatopeya que significa viento) palabras derivadas del Aymara y que podría ser traducido como “triunfo ondeante”. Tuvieron la palabra, pero no el símbolo, fue ahí donde apareció la figura del cofundador del movimiento nacionalista revolucionario German Monroy, quien propuso un patrón de diseño que ya había aparecido en algunas prendas y complementos como las chuspas, o bolsas donde se llevaba las hojas de coca y cacao, y que gozaba de cierta popularidad en esos años, también se asemejaba a la etiqueta de un refresco con alcohol de producción boliviana, la “champancola”.

En los años 70 del siglo pasado se difundió y estandarizó la wiphala de la mano del intelectual y diputado indigenista German Choque Condori quien se auto-tituló,  Inka Waskar Chukiwanka, este diputado indigenista reclamó ser el “re descubridor” de la wiphala y restaurador del “año nuevo indio”, además se atribuyó la recuperación del milenario idioma Tawa e inventó el calendario marawata o calendario indio.

El mismo Choque Condori describe que “en un primer momento, incluso nuestros propios hermanos indios lo rechazaban”.

Eric Hobsbawn sostiene que “muchas tradiciones son realmente invenciones de las elites nacionalistas como justificación de la supuesta existencia e importancia de sus naciones”

Parafraseando a Karl Popper diremos que la historia debe comenzar hablando de los mitos y críticando a los mitos”.


Autor: Juca Fevel


Bibliografía:

Bernabé Cobo, Historia del Nuevo Mundo (1609)

Axel káiser / Gloria Alvarez, El engaño populista.

Marcos moreno, El fraude histórico de la “bandera indígena”.

Alfonso Galindo Hervás, Los mitos, sobre la falsedad de los mitos

Franco Limber, “breve historia real de la Wiphala”



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